Fuente: Rosario12
La Afip allanó las oficinas de Newell´s en el Parque
Con el propósito de descifrar el camino financiero e impositivo de las transacciones que llevaron a los jugadores Sebastián Domínguez y Leonardo Ponzio al fútbol extranjero por parte de Ñuls; la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) elevó meses atrás sendas denuncias penales contra la dirigencia de la entidad del parque Independencia. En el marco de estas investigaciones, en las cuales se sospecha que el club evadió compromisos fiscales por una suma superior al medio millón de pesos, el pasado miércoles fue allanada la sede administrativa de la institución rojinegra en el parque Independencia, donde los inspectores contables se hicieron de documentación que se sumará al expediente. En su obligación como agente de retención, Ñuls le descontó oportunamente a los futbolistas la cifra correspondiente al Impuesto a las Ganancias, monto que el fisco dice no haber percibido. "Se encontró documentación que compromete aún más a los dirigentes", anticipó un funcionario del fisco nacional.
Como resultado de un trabajo realizado por la Unidad Fiscal de Investigaciones de Delitos Tributarios y Contrabando (UFITCO), el 27 de febrero pasado la AFIP se presentó otra vez en la Justicia para denunciar irregularidades en la conducta fiscal de Ñuls. Según el organismo recaudador, el club actuó como agente de retención al Impuesto a las Ganancias sobre los réditos económicos gozados por Domínguez y Ponzio cuando fueron transferidos por Ñuls, pero aquellos billetes descontados a los jugadores no fueron depositados al fisco, abriéndose así la instancia judicial, como ya ocurriera también con los pases de Diego Mateo, Maximiliano Rodríguez, Claudio París, Lucas Bernardi, Damián Manso y Diego Crosa, y dentro del marco de lo establecido por la Ley Penal Tributaria 24.769.
En momentos donde numerosos hinchas de Boca y Ñuls hacían cola en el parque Independencia para dar con el boleto que les permitiría ingresar al Coloso del Parque al día siguiente para presenciar el juego que animarían los primeros equipos de ambos clubes, un allanamiento tuvo lugar en la sede administrativa, ocasión donde esta vez los agentes contables "fueron recibidos de excelente manera". La inspección ordenada por la Justicia tenía como propósito dar con documentación que pudiera disipar dudas del expediente abierto sobre la dirigencia por "retenciones indebidas", precisamente en lo referente al Impuesto a las Ganancias en las ventas de Domínguez y Ponzio.
El defensor fue vendido el 5 de enero de 2005 al Corinthians de Brasil por 2.500.000 dólares. De acuerdo al expediente, en la operación el futbolista percibió 1.087.500 pesos correspondiente al 15 por ciento, de los cuales Ñuls le retuvo $323.490, respondiendo así a su obligación de actuar como agente de retención. Pero ese dinero no ingresó a la AFIP. En el caso del volante, el 24 de julio de 2003 fue transferido a Real Zaragoza de España por 2.250.000 dólares. El ahora jugador de River debía percibir $1.012.500 de acuerdo a lo que dispone el Convenio Colectivo de Trabajo de los futbolistas. Ñuls le cedió un cheque de $711.510, reteniéndose entonces $300.990 para cubrir la demanda impositiva reglamentada en el Impuesto a las Ganancias. Aquella plata debitada al futbolista tampoco ingresó a las cuentas fiscales.
En el allanamiento del pasado miércoles, los inspectores dieron de documentación que respaldaría la versión de los dirigentes en cuanto se cumplió con la responsabilidad del club como contribuyente en uno de los dos casos. Pero dicha operación fue concretada con un "cheque que carecía de fondos", lo que para el fisco mantienen a Ñuls en situación evasor. Las causas penales por evasión de impuestos descansan en el Juzgado Federal Nº 4. El año pasado la Cámara de Apelaciones dejó firme el procesamiento de los principales directivos de Ñuls por "retenciones indebidas" de impuestos. Pero la embestida fiscal contra el club rojinegro promete entregar nuevas causas: "Hay serias sospechas sobre la venta de Cristian Ansaldi que seguramente llevaremos a la Justicia. Y se empezó a trabajar en la operación de Diego Garay", advirtió un abogado del organismo recaudador.
Como resultado de un trabajo realizado por la Unidad Fiscal de Investigaciones de Delitos Tributarios y Contrabando (UFITCO), el 27 de febrero pasado la AFIP se presentó otra vez en la Justicia para denunciar irregularidades en la conducta fiscal de Ñuls. Según el organismo recaudador, el club actuó como agente de retención al Impuesto a las Ganancias sobre los réditos económicos gozados por Domínguez y Ponzio cuando fueron transferidos por Ñuls, pero aquellos billetes descontados a los jugadores no fueron depositados al fisco, abriéndose así la instancia judicial, como ya ocurriera también con los pases de Diego Mateo, Maximiliano Rodríguez, Claudio París, Lucas Bernardi, Damián Manso y Diego Crosa, y dentro del marco de lo establecido por la Ley Penal Tributaria 24.769.
En momentos donde numerosos hinchas de Boca y Ñuls hacían cola en el parque Independencia para dar con el boleto que les permitiría ingresar al Coloso del Parque al día siguiente para presenciar el juego que animarían los primeros equipos de ambos clubes, un allanamiento tuvo lugar en la sede administrativa, ocasión donde esta vez los agentes contables "fueron recibidos de excelente manera". La inspección ordenada por la Justicia tenía como propósito dar con documentación que pudiera disipar dudas del expediente abierto sobre la dirigencia por "retenciones indebidas", precisamente en lo referente al Impuesto a las Ganancias en las ventas de Domínguez y Ponzio.
El defensor fue vendido el 5 de enero de 2005 al Corinthians de Brasil por 2.500.000 dólares. De acuerdo al expediente, en la operación el futbolista percibió 1.087.500 pesos correspondiente al 15 por ciento, de los cuales Ñuls le retuvo $323.490, respondiendo así a su obligación de actuar como agente de retención. Pero ese dinero no ingresó a la AFIP. En el caso del volante, el 24 de julio de 2003 fue transferido a Real Zaragoza de España por 2.250.000 dólares. El ahora jugador de River debía percibir $1.012.500 de acuerdo a lo que dispone el Convenio Colectivo de Trabajo de los futbolistas. Ñuls le cedió un cheque de $711.510, reteniéndose entonces $300.990 para cubrir la demanda impositiva reglamentada en el Impuesto a las Ganancias. Aquella plata debitada al futbolista tampoco ingresó a las cuentas fiscales.
En el allanamiento del pasado miércoles, los inspectores dieron de documentación que respaldaría la versión de los dirigentes en cuanto se cumplió con la responsabilidad del club como contribuyente en uno de los dos casos. Pero dicha operación fue concretada con un "cheque que carecía de fondos", lo que para el fisco mantienen a Ñuls en situación evasor. Las causas penales por evasión de impuestos descansan en el Juzgado Federal Nº 4. El año pasado la Cámara de Apelaciones dejó firme el procesamiento de los principales directivos de Ñuls por "retenciones indebidas" de impuestos. Pero la embestida fiscal contra el club rojinegro promete entregar nuevas causas: "Hay serias sospechas sobre la venta de Cristian Ansaldi que seguramente llevaremos a la Justicia. Y se empezó a trabajar en la operación de Diego Garay", advirtió un abogado del organismo recaudador.
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